Santo Domingo, 9 sep.- Unas cinco mil amputaciones se practican en la República Dominicana al año, debido a complicaciones del pie diabético sin eventos traumáticos por falta de prevención y malas prácticas de podólogos y pedicuristas, trascendió hoy.
Con el propósito de colaborar en la reducción de las consecuencias que ocasiona el incorrecto cuidado de los pies, Pedro Mena, director de la Unidad de Pie diabético del Centro Médico de Diabetes, Obesidad y Especialidades (Cemdoe), desarrolla un taller teórico-práctico como parte del proyecto «Salvamento del pie diabético».
En el curso, dirigido especialmente a personal de salones de belleza, pedicuristas y podólogos, el doctor explicó que «el cuidado preventivo de los pies es esencial para todas las personas, independientemente de su estado de salud, ya que la falta de atención adecuada puede derivar en problemas serios», sobre todo en los diabéticos.
Explicó que los programas de atención, que incluyen educación sanitaria y sobre cuidados del pie, exploración regular y detección del grado del riesgo de úlcera, pueden reducir la aparición de lesiones en más de un 50 por ciento de los pacientes.
El experto advirtió que dicha patología ocurre cuando hay niveles inadecuados de glucosa en la sangre y otros factores que provocan un daño en los vasos y nervios, que pueden producir complicaciones a mediano y largo plazo.
Mena aconsejó a quienes se ocupan del cuidado del pie, a respetar las cutículas, pues son protección para la uña, y a no colocar cremas, aceites ni lociones dentro de los dedos.
Asimismo, instó a lavarse las manos antes y después de cada pedicura, así como no reutilizar limas, pues pueden constituir una fuente de transmisión de hongos y virus de una persona a otra; esterilizar el instrumental y evitar eliminar toda la callosidad de los pies, pues son un mecanismo de defensa.
El pie diabético puede llevar a la formación de úlceras, infecciones y, en casos graves, gangrena, debido a la reducción de la sensibilidad y la mala circulación.